La Traviata se estreno el 1 de febrero de 1855 en el Teatro Real y siglos más tarde en concreto en el año 2008 inicia a Nemorino en su pasión por la Ópera, en su familia nadie es aficionado a este genero musical, el hecho de conocer parte de la historia de su bisabuelo José Fernández Armengol que fue masón conocido como Verdi condenado a 30 años de cárcel por Franco, con la ayuda de su familia por los Pirineos huye a Francia. Para proteger a su familia se marcha a México donde muere solo años más tarde. Además de masón también era barítono cantando en el Liceo y en México hasta su muerte. Sin duda la historia de su bisabuelo, influye en su afición por la Ópera estos últimos años y sus amigas sopranos.
Del 4 al 10 de mayo se celebra en Madrid la semana de la ópera con diversas actividades y visitas gratuitas al Teatro Real, Nemorino conocía a Christine que le había enseñado las salas de ensayo del teatro y días más tarde acude al museo del traje donde el Teatro Real exhibe algunos de los trajes confeccionados en sus talleres para las óperas.
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| Escena de la boheme, museo del traje |
Un día antes de que La Traviata se retransmita en directo desde la plaza de Oriente y en varios espacios culturales de Madrid, Nemorino acude al Teatro Real a la representación de La Traviata ópera de Verdi con el propósito de volver a emocionarse, ocho años después de su primera ópera en el Teatro de Madrid.
Para el jueves 7 de mayo no habían entradas estaba todo vendido, Nemorino había comprado su entrada en el mes de marzo antes de su viaje a Turín, debido al precio de las entradas había comprado una con visibilidad reducida acorde con su presupuesto.
Una hora antes espera a su amiga Christine en la puerta de los artistas para charlar un rato, teniendo el gusto de saludar al maestro Leo Nucci barítono como su bisabuelo José Fernández Armengol, todavía tiene tiempo de tomar una caña en la taberna del Alabardero antes de entrar al teatro.
Media hora antes entra por la puerta principal subiendo las escaleras hasta la tercera planta, ocupando su butaca en el palco número 6. A las ocho en punto el director musical Renato Palumbo saluda al público asistente y a golpe de batuta dirige a la orquesta comenzando con el sonido de los violines en el preludio que da paso al gentío en casa de Violetta y al “Libiamo ne´lieti calici” el famoso brindis que canta Alfredo, Violetta y el coro, Nemorino tiene que esperar al descanso para brindar con vino tinto, en el primer acto la soprano rusa Venera Gimadieva se luce en el “Sempre libera” que emociona a Nemorino.
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| Violetta y Alfredo |
En el segundo acto entra en escena el maestro Leo Nucci con varios duetos con Violetta la soprano Venera Gimadieva, destacando la cancioneta “Di Provenza il mar, il suol”. Al final del segundo acto él publico aplaude la magistral actuación de Leo Nucci.
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| Giorgo Germont y Violetta |
Otros veinte minutos de descanso antes del tercer acto donde aparece Violetta postrada en la cama por culpa de la tisis, se muere pero antes recibe el perdón de Alfredo y recuerdan los buenos momentos pasados en “ Parigi, o cara , noi lasceramo”, finalmente muere Violetta y cae el telón.
Y él publico aplaude a los artistas por orden de aparición, los más aplaudidos Venera Gimadieva y Leo Nucci, las presas de Nemorino en su caza de autógrafos y fotos para su colección de grandes voces de la ópera, en poco más de cinco minutos esta en la puerta de camerinos esperando para entrar hablando con su amiga Christine. La gente se agolpa en la puerta del camerino de Leo Nucci esperando para entrar, Nemorino aprovecha que no hay nadie para entrar al camerino de Violetta la soprano rusa Venera Gimadieva y después entra al camerino de Leo Nucci que le dedica una foto de Giorgo Germont, se despide de su amiga Christine hasta su próxima visita el viernes 5 de junio con su amigo Rafael a la ópera Fidelio de Beethoven. Como siempre que visita el Real termina el día cenando en la Taberna de Los Angeles.
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| Venera Gimadieva y Nemorino |
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| Leo Nucci y Nemorino |
