jueves, 29 de agosto de 2013

Otra noche en vela en Peñalara




En los últimos meses el amor compartido de la princesa Mari Cruz Campo con Franciscopulos y Albertopulos se había apagado. Además por culpa de un pacto con un antiguo príncipe pierde su palacio de Colmenar, arruinada por jugar todas las semanas la quiniela del amor con pocos aciertos al final de temporada.
Muchos cambios para una princesa acostumbrada a vivir del cuento, ante esta situación en él colé pide el traslado en pocos días se traslada al valle del Kas en la vertiente segoviana de la sierra al lado del Palacio de La Granja donde en sus jardines se instala en un banco.

Un día paseando por los jardines conoce a Ildefonso granjero y jardinero del palacio, con el paso del tiempo la princesa Mari Cruz Campo se enamora de Ildefonso y se traslada a las dependencias del palacio de la Granja. Cada día desde los jardines Ildefonso contempla la cumbre de Peñalara mientras la princesa le cuenta su historia de amor en la noche en Peñalara que compartió con sus amigos Franciscopulos y Albertopulos.
Un año después de esta historia vuelven a la cumbre de Peñalara la princesa Mari Cruz Campo con su amado Ildefonso que nunca había dormido en la cumbre de Peñalara.
Albertopulos que organiza la ascensión con Ascensión la estrella mallorquina que había iluminado el corazón de Franciscopulos en la Atalaya de la sierra de Tramontana.
En su segunda noche en Peñalara Albertopulos busca su estrella que ilumine su corazón.

El sábado 24 de agosto a las cinco de la tarde en el puerto de Cotos la princesa Mari Cruz Campo vuelve a ver a los caballeros que la rescataron de su cautiverio en la torre del castillo de Manzanares el Real, después de tanto tiempo sin compartir nuevas aventuras.
La ruta de ascenso con Ascensión la misma que el año pasado por la laguna de los pájaros y el risco de los claveles con una pequeña variante la laguna grande de Peñalara.
Sin duda el más pesao del grupo Albertopulos con la mochila de 65 litros, saco de invierno, farolillo, camping gas y la empanada, esta vez no olvido la empanada en casa.

Con una temperatura de menos de 30 grados inician la ruta con sombras en el primer tramo, superados los 2.000 metros la temperatura es agradable por el viento que sopla, en la laguna de los pájaros cogen agua en un pequeño manantial mientras observan el risco de los claveles el tramo más técnico de la ruta.

Continúan ascendiendo por la senda y al llegar al risco la senda se bifurca, Albertopulos prefiere ir por la cresta los demás continúan por el sendero de abajo, a mitad del risco se encuentran cada uno busca el mejor paso por los bloques de piedras.
Superado el risco de los claveles la senda continúa ascendiendo hasta el vértice geodésico de Peñalara (2.430 m) en poco más de tres horas y media están en la cumbre de Peñalara donde el sol esta a punto de acostarse.

En el vértice geodésico esta la recepción habían reservado por Booking una habitación triple con dos camas supletorias, la misma que el año pasado esperemos que el aire acondicionado este arreglado.
Dejan las mochilas en la habitación para contemplar las maravillosas vistas de la puesta de sol en la cumbre de Peñalara.

 
El menú de la cena el mismo que el año pasado filetes de pollo con pimientos, embutido y un buen vino, antes de la cena Albertopulos se quita las botas en la mochila tiene zapatillas de descanso como en los refugios de montaña, al olor de los quesos un invitado inesperado el ratón Tico que esta de paso viajando con Willy Fog.

 
Ya de noche el farolillo ilumina la mesa donde comparten las viandas y el vino, observados por la luna casi llena que ilumina más que el farolillo de Albertopulos de Coronel Tapìoca.
A pesar del viento que esta en calma la temperatura baja hasta los 12 grados, combaten el frio con más ropa, el vino y un orujo de crema asturiano.


Primero Ascensión derrama el vino sobre el mantel, luego Albertopulos el orujo en el saco de Franciscopulos. Antes de las doce están todos dentro del saco, la princesa Mari Cruz Campo tiene miedo a los ratones se acuesta con su Gusiluz, a Franciscopulos con el olor del orujo le esperan dulces sueños, en cambio Albertopulos observa el cielo esperando su estrella, cansado de esperar decide contar ovejas para poder dormir.
La luna casi llena ilumina la cumbre del Peñalara pasan las horas y duermen a ratos, alguno pasa la noche en vela y otro se queda a dos velas en el tema del amor.

El domingo temprano Frank de la jungla les despierta para ver algo nunca visto en Peñalara, el amanecer con un rebaño de cabras, se quedan embobados ante tanta belleza, aunque algunos piensan que a las cabras están contratadas por Franciscopulos para impresionar a Ascensión.


Desayunan zumos variados, tortas y bizcocho antes de recoger el campamento para regresar al puerto de Cotos, la ruta de descenso más corta y suave por Dos Hermanas y pista.
Antes de la once están almorzando en Venta Marcelino con tercios de cerveza y la tortilla de chorizo de Franciscopulos.
En el aparcamiento de Cotos Ildefonso y la princesa Mari Cruz Campo se despiden hasta la próxima luna llena para vivaquear en Cuerda Larga

 


 

jueves, 22 de agosto de 2013

Don Carlo y el Genaro

Senda del Genaro
Don Carlo
Albertopulos continua con sus pruebas de Maratón y Ultra, después de completar la trilogía de Zumbaos junto a su amigo Franciscopulos y haber recuperado en el paraíso de la Alhambra.
El domingo 18 vuelve a correr un ultra de 51 kilómetros con Franciscopulos, El Juli Gacela de Cubas, Isma Lynce de Parla, Ruben y Genaro.
Pero antes el viernes 16 asiste en compañía de Hellen y Rodrigo al Ultra operístico de Don Carlo de Giuseppe Verdi, retransmitida en directo desde el Festival de Salzburgo en los cines Kinepolis de Madrid.
La opera cuenta la historia de Don Carlos infante de España hijo del rey Felipe II en cinco actos y más de cuatro horas. En el Festival de Salzburgo la opera Don Carlo empieza a las 19:30 con dos intermedios y los cambios de escena un poco lentos, a la una menos cuarto por fin baja el telón y el público aplaude a Jonas Kaufman (Don Carlo), Anja Harteros (Isabel de Valois) y Thomas Hampson (Rodrigo, Marques de Posa), en el cine se escuchan tímidos aplausos, más de cinco horas todo un ultra de la opera. Abandonan la sala y encuentran todo cerrado, excepto un turco-mejicano donde comen algo para volver a casa llaman a un taxi.

El domingo 18 a las ocho de la mañana en la plaza del Berrueco se presentan 6 valientes ultrafondista, tres de ellos zumbaos para desafiar al calor de agosto en la sierra pobre de Madrid, la escasez de sombras y la falta de agua por el camino.

 
Quieren completar a pie la senda del Genaro de 51 kilómetros y más de 1.000 metros de desnivel positivo. Entre los zumbaos Albertopulos, Franciscopulos, Isma Lynce de Parla, acompañan a los zumbaos El Juli Gacela de Cubas, Ruben y Genaro.
En los primeros kilómetros el guía Franciscopulos pone a prueba al grupo en el primer desvío, ascienden cerca de la Atalaya del Berrueco, descendiendo en zigzag hasta Patones de Arriba (Km 10) primer avituallamiento (fuente de caño).

 
Continúan por la senda de Genaro en ascenso superan una última cuesta empinada para alcanzar el Cancho de La Cabeza (1.264 m) punto más alto del recorrido.
Descienden por pista hasta el poblado del Atazar ocupado por una campamento de la tercera edad que amablemente ofrecen agua a los sedientos corredores.
Continúan bajando hasta el río del Lozoya donde beben y se refrescan, por bloques de piedra cruzan el río seguidamente encuentran un cruce donde cogen la senda de la izquierda hasta un puente que cruza al otro lado del embalse, en este punto Franciscopulos el guía duda y vuelven sobre sus propios pasos hasta el mismo cruce, esta vez encuentran las marcas por la senda de la derecha que sube con tramos donde la vegetación cubre el camino, en este tramo el calor aprieta y no hay apenas sombra el Juli con la pájara decide abandonar en el próximo pueblo de paso El Atazar, Albertopulos también piensa en acompañar a el Juli y en las cervezas en el bar, sus piernas poco rodadas en las últimas semanas no quieren correr más.

Ya puede ver el pueblo su final se acerca pero la senda de Genaro continua subiendo, por fin en casi 5 horas de marcha entran en El Atazar donde se refrescan en la primera fuente con pilón a más de uno le entran ganas de bañarse.

En el bar de la plaza del pueblo abandonan el Juli, Albertopulos y Genaro en el kilómetro 26,5, el resto después de un breve avituallamiento continúan 25 kilómetros más por la senda del Genaro hasta El Berrueco.
Los retirados mientras gestionan su regreso al Berrueco recuperan con varias jarras de cerveza. Reciben una llamada de emergencia de Franciscopulos en el siguiente pueblo Robledillo de la Jara, Ruben también abandona al ver a Isma frotándose con vaselina las pelotas le provoca una subida de pulsaciones y decide abandonar por precaución.

Después de una hora en el bar bebiendo cervezas recuperados y contentillos, aparece un cantero-taxista que les recoge para bajar al Berrueco punto de partida y final de la senda, mientras Genaro marcha con su coche a recoger a Ruben en Robledillo, el taxista que conocía la senda de joven la recorría en burro les deja en el bar de tapas de su prima, donde sentados en la terraza mientras esperan a Genaro y Ruben continúan recuperando con otra jarra de cerveza y un plato combinado.
Al rato aparecen Ruben y Genaro que prefieren una tosta de jamón y otra jarra de cerveza antes de volver a casa.
Albertopulos y el Juli tienen que esperar otra hora a los campeones Franciscopulos e Isma Lynce de Parla que completan los 52 kilómetros de la senda del Genaro en 8:56:32 a pesar del calor, el perfil del recorrido y los continuos parones por los abandonos de sus amigos.


martes, 13 de agosto de 2013

XXIX Subida al Pico Veleta


El sábado 3 de agosto del 2013 Albertopulos y Franciscopulos parten a Granada en busca del final de su trilogía de zumbaos, después de correr el Ultra del Tajuña y el Maratón de Las Tucas solo les falta subir corriendo al Veleta.
Afrontan la carrera por asfalto más alta de Europa, considerada la más dura del mundo la Subida al Pico Veleta desde Granada, 50 kilómetros y 2.682 metros de desnivel.

 
En la estación de Atocha suben al Orient Exprés que en 4 horas y media llega a la estación de Granada, donde a lo lejos divisan el Veleta con sus neveros.
Un taxista dicharachero les conduce al hotel Alhambra Real a tres kilómetros del centro.

Mientras esperan al autobús 33 una joven andaluza indignada por la tardanza del 33, pregunta a los mozos por su destino para indicarles su parada, esto en Madrid no pasa. Pero no están solos en la parada hay un par de pesaos un poco bebidos que quieren ligar con la moza.
Con casi una hora de retraso suben al 33 para ir al centro a comer, apenas hay gente por las calles el calor aprieta.
Después de comer esperan otra vez al 33 para volver al hotel.
Ya en el hotel recogen sus dorsales y se bañan en la piscina.

Albertopulos
Esperan a que el sol se esconda para volver a pie al centro, por el camino ven pasar el 33.
Llegados al centro tienen que buscar el inicio de la famosa ruta de tapas de Granada, comienzan con mal pie en los primeros bares pero después la ruta mejora.
Antes de las doce de la noche vuelven caminando al hotel, al día siguiente tienen que madrugar.

El domingo a las cinco suena el despertador para bajar al desayuno. Albertopulos desayuna café, zumo, tostada de tomate con embutido y bollería variada. En cambio Franciscopulos desayuna menos, por si acaso toman un protector de estomago para la carrera.
Después del desayuno un autobús traslada a los corredores al Paseo de La Bomba donde esta la salida, algo más de 500 chalaos quieren subir al Veleta.

A las siete de la mañana comienza la prueba un par de vueltas al paseo antes de coger la carretera de Sierra Nevada, los primeros kilómetros en ligera pendiente al paso por Cenes primer avituallamiento, Albertopulos bebe el agua es caldo un problema para su estomago.
El siguiente pueblo de paso Pinos Genil pasado el kilómetro 12 la pendiente aumenta, Franciscopulos con mayor zancada adelanta posiciones dejando atrás a su amigo Albertopulos.
Franciscopulos con problemas de estomago desde el inicio no encuentra el momento y lugar para plantar un pino.

Hasta el kilómetro 20 los avituallamientos están cada 4 kilómetros y luego cada 3 kilómetros, menos en el primero el agua esta en bolsas y esta fría, buena noticia para él estomago de Albertopulos.
A pesar de la buena noticia con el paso de los kilómetros y avituallamientos comienza con sus problemas de estomago.

Además desde el kilómetro 12 hasta el Veleta solo hay un par de tramos de ligero descenso y con el paso de los kilómetros suben más alto hasta superar los 3.000 metros.
En el kilómetro 22 Albertopulos alcanza a Franciscopulos pero dos kilómetros después vuelve a quedarse hasta perder de vista a su amigo.
No paran de subir una curva a la derecha y otra a la izquierda, por el kilómetro 30 Albertopulos pasa en 3 horas y 13 minutos quiere correr muchos kilómetros, Franciscopulos continua por delante corriendo sin parar hasta la meta del Veleta.

Como en años anteriores algo menos de 50 kilómetros de distancia, este año por la cantidad de nieve en las faldas del Veleta la distancia es 47,5 kilómetros con la meta situada a 3.282 metros a 100 metros de desnivel de la cima del Veleta, con un desnivel positivo de 2.682 metros.
Poco antes de llegar a la barrera donde empieza el tramo de carretera vieja y salida de la Mini Subida, la segunda chica adelanta a Albertopulos ahora comienza lo duro la antigua carretera sin trafico con tramos con el asfalto destrozada, la altitud superan los 2.500 metros, a la vista el Veleta y una serpiente multicolor se retuerce en cada curva, en este punto cada uno sube como puede trotando o caminando.

En el avituallamiento del kilómetro 42 estorbado por la moto del policía Albertopulos para a beber un vaso de cola y sus piernas no pueden seguir trotando, toca caminar hasta la meta, su paso por el maratón 5 horas.
Continúan sus problemas estomacales esta a punto de vomitar, igual que la paso en el 2008.
La gente le anima ¡ venga que solo faltan tres curvas! La meta esta cerca, al igual que Franciscopulos que le acompaña en los últimos metros, había llegado en 5:33:38.
Albertopulos quiere correr los últimos metros pero no puede esta a punto de romperse muscularmente, cruza la meta en 6:05:07.
Llegan a meta 338 chalaos Franciscopulos en el puesto 95 y Albertopulos el 152.

Pero la aventura no termina en el Veleta falta la bajada, un microbús les baja hasta el primer telesilla que cogen después de bajar por una cuesta pedregosa.
Montado en el telesilla con Franciscopulos se le monta un gemelo ¡qué dolor! Pobre Albertopulos que intenta estirar la pierna, a la hora de bajar un problema para Albertopulos a punto de volver a subir está, al final escapa por los pelos.
Vuelven a coger otro telesilla esta vez de cabina para bajar hasta la estación de esquí de Borreguiles (2.800 m) donde se encuentran las duchas, el masaje, la entrega del trofeo y un picnic (bocata de chorizo y agua no fría).
Después de la ducha Albertopulos pasa por el masaje antes de coger el autobús de vuelta al hotel.

Pero no todo es correr y sufrir ahora toca disfrutar de lo conseguido, después de haber estado en el infierno por la mañana a pesar de haber estado en las nubes, ahora las puertas del paraíso están abiertas para ellos.
Lo primero que encuentran la piscina del hotel con un par de tercios que les esperan al lado de las tumbonas.
Después del baño encuentran abajo otra puerta custodiada por un ángel, sin duda esta es la puerta de entrada al paraíso los baños árabes del hotel Alhambra Real.

A las seis de la tarde comienzan con el circuito de las termas con agua caliente, templada, fría y el baño turco.
Mientras disfrutan en la terma de agua caliente con el jacuzzi, oyen una voz dulce angelical que les llama, son las siete llevan una hora en el paraíso, ante sus ojos un ángel la joven andaluza del 33, ¡qué sorpresa para Albertopulos y Franciscopulos! Su ángel es la masajista del paraíso con un vestido de seda blanco para recibir a los heroes del Veleta Franciscopulos y Albertopulos.

Tumbados en la camilla primero Albertopulos y después Franciscopulos se olvidan de la carrera al sentir las suaves manos de la masajista acariciando su fornido pecho y su cabeza, mientras sus redondos pechos se inclinan ante sus ojos, provocando en ellos pensamientos puros e impuros mientras su veleta gira bajo la toalla.
Albertopulos cierra los ojos para apartar de su mente pensamientos impuros, piensa en su cuento no apto para niños, al lado Franciscopulos relajado espera su turno.

Albertopulos no quiere abandonar el paraíso, mientras es el turno de Franciscopulos y sus pensamientos, que solo él lo sabe.
Pasan a la sala de al lado a tomar un té relajados, pero su ángel les sorprende con una copa de cava para brindar con los heroes, no sabían que incluía el cava en el precio de pareja.

Otra vez en la puerta del paraíso hablan con los ángeles de la Alhambra la recepcionista y la masajista, ante sus ojos buenas vistas del Veleta y Mulhacén, muy a su pesar las puertas del paraíso se cierran por hoy ahora hay que pensar en Sodoma y Gomorra.

De vuelta al horno de Granada luciendo sus camisetas del Veleta por el centro en su segunda ruta de tapas a comer almejas, en Los Diamantes el mejor bar de pescadito no encuentran buenas almejas al final comen navajas y boquerones.
A media noche viajan con su imaginación a Túnez con sus bazares y teterias, están en una teteria tomando un té tunecino y fumando una sisha de multífrutas.
Vuelven al hotel paseando cansados por el madrugón, sus viajes por el infierno, el paraíso y Túnez. Pasadas las dos de la mañana desde las cinco en pie se acuestan con su trofeo.

Al día siguiente aprovechan el buffet del desayuno para recuperar energías, bajo un sol de justicia que calienta desde las diez de la mañana suben paseando hasta la Alhambra donde visitan los jardines, el Palacio del Generalife y el Palacio Nazaríe con su patio de los leones.
Pasadas la una bajan caminando al centro todavía tienen tiempo de completar la tercera ruta de tapas de Granada.

Antes de volver a Madrid, recogen las maletas en el hotel donde un taxista despistado les lleva a la estación de autobuses, al final con tanta vuelta tienen que pagar 12 euros, antes de subir al Orient Exprés se despiden de los encantos y calor de Granada con unas copas.


sábado, 10 de agosto de 2013

Maratón de Las Tucas




Una semana después de correr el I Ultra del Tajuña Franciscopulos y Albertopulos viajan por carretera acompañados de Ascensión y los Vintage People cantando camino de Benasque, el último tramo de carretera sinuosa y algunos tramos destruidos por las últimas lluvias en el Pirineo Aragonés.
Pasadas las diez de la noche llegan a Benasque donde se hospeda Albertopulos en el Hotel Pilar.

A las doce de la noche del viernes 26 de julio poco más de 200 valientes se atreven con un recorrido brutal de 114 kilómetros y 6.650 metros de desnivel positivo acumulado del Gran Trail Aneto - Posets con un tiempo limite de 36 horas.

Entre los valientes destaca Nuria vencedora de Trail de la Tramuntana 2013, oscense que viene de Mallorca con Miquel Angel, una de las pocas mujeres que se atreven con la prueba, en categoría masculina destacan varios mallorquines de la selección balear de carreras de montaña.
Albertopulos acompaña a los dos valientes a la salida en el paseo de Tilos de Benasque donde esperan Franciscopulos y Ascensión para grabar la salida.

Miquel Ángel y Nuria
 
Minutos antes presa de los nervios vuelven al hotel a por su libro de ruta temen perderse por la noche. A pesar de tener el track de recorrido en el gps.
Después de ver la salida del Gran Trail Aneto – Posets un bocata, una cerveza y a descansar al día siguiente corren el Maratón de Las Tucas.

A las ocho de la mañana del sábado 27 de julio la salida de la segunda carrera la Vuelta al Aneto, con una distancia de 62,3 kilómetros y un desnivel positivo acumulado de 3.570 metros.
Después de recoger los dorsales y regalos de la organización (vino de Alquezar, aceite de Somontano, longaniza de Graus y un paraguas Trango).

Albertopulos, Franciscopulos, Ascensión y Raúl con sus bambas Nike se dirigen a la avenida de Tilos a pasar el control de material obligatorio (mapa, agua, venda) poco comparado con otros años. Al final con casi 1.000 corredores no hay control de material, en el arco de salida las primeras fotos con otros peñalaros minutos antes aparecen los Trastos con el sonido de sus cencerros para animar a los corredores.

 
A las diez la salida se retrasa unos minutos para aplaudir al primer corredor del Gran Trail que lleva más de 60 kilómetros en sus piernas. Por fin comienza el Maratón de Las Tucas con un recorrido de 41,6 kilómetros y un desnivel positivo acumulado de 2.240 metros, que resulto ser de 2.810 metros.

 
Albertopulos y Franciscopulos con la referencia de su tiempo en el Trail de Peñalara de 60 kilómetros calculan un tiempo de 6 horas, que al final con un recorrido muy técnico y exigente no piensan en el tiempo su objetivo es llegar.

A la salida de Benasque el primer tapón por sendero estrecho para ascender a Cerler – El Molino primer control de carrera y primer despiste de varios corredores que continúan por pista, en lugar de coger el desvío a Anciles.

Albertopulos con un grupo retrocede varios metros para coger el sendero correcto, en el descenso encuentra a Ascensión entre matorrales y más adelante a Franciscopulos de igual modo.

En Eriste kilómetro 9,3 comienza el ascenso al primer avituallamiento en el refugio de Ángel Órus (17,5 Km) por sendero y bloques de piedra de todos los tamaños, con tramos de trepada, agua y barro alcanzan el punto más alto del recorrido el Collado de La Plana (2.708 m) kilómetro 22.

El ascenso hasta el Collado que de plano no tiene nada es de 4 kilómetros y 600 metros de desnivel.
Albertopulos sufriendo alcanza el Collado de La Plana en poco menos de 4 horas y media, por detrás Franciscopulos y Ascensión también coronan.

Pero falta lo peor el descenso entre bloques de piedra, sin senderos arrastrando las posaderas por los Ibones de Batisielles con paisajes espectaculares.
En el descenso Franciscopulos, Ascensión y los peñalaros pasan a Albertopulos con problemas de gemelos y las piernas cargadas, por su cabeza pasa su próximo reto en una semana los 50 kilómetros de subida al Veleta.

Una roca puntiaguda produce un pequeño corte en la mano izquierda de Albertopulos que sangra abundantemente. El último tramo del descenso por sendero pedregoso donde le adelantan otros corredores, otra pequeña subida y el refugio de Estós a la vista (Km 30), otro descenso por sendero estrecho donde Albertopulos sufre una caída hasta cruzar el puente para volver a subir hasta el control del refugio donde Albertopulos sediento bebe tranquilamente una cerveza fría aunque un poco cara solo piensa en tomar otra cerveza cuando llegue a la meta.

Los últimos 11 kilómetros por pista de bajada y asfalto, después de muchos kilómetros sus piernas vuelven a correr a pesar de la parada en Estós quiere bajar de las 8 horas.
En el tramo de carretera a 3 kilómetros de Benasque consigue correr a ritmo de 5 minutos el kilómetro adelantando a varios corredores, por él trafico y los destrozos de las lluvias corre por la izquierda o derecha de la carretera, algunos coches tocan el claxon para animar a los corredores, a falta de dos kilómetros comienza a llover y se acuerda de los corredores que estén por la alta montaña.
Animado por la gente entra al pueblo adelantando a más corredores antes de cruzar la meta con un tiempo de 8:02:58 animado por Franciscopulos y Ascensión que habían llegado en 7:46:52.

Albertopulos cruzando la meta
 
El avituallamiento en meta escaso una caña de cerveza, después de la ducha una buena pizza con sus amigos y su hermano que había estado desde el viernes por la noche en el control de Llauset.

 
Después de la cena los Finisher brindan con vino de Somontano, Albertopulos todavía tiene sed y antes de dormir otro par de jarras de cerveza.

Al día siguiente desayuna con su amiga Nuria que abandonó en Benasque (Km 63) por ir justos de tiempo por culpa de la lesión de su compañero Miquel Ángel, buena decisión al saber que la organización por la lluvia y crecida del barranco d’Añes Cruzes paro la carrera del Gran Trail, donde solamente 17 corredores terminaron la prueba, algunos corredores corrieron peor suerte y abandonaron con hipotermia y congelaciones a pesar de estar en el mes de julio.

Mientras desayunan comentan sus sensaciones de carrera, para Albertopulos la carrera más dura que ha corrido en montaña.
Antes de que vengan sus amigos, tiene tiempo de pasear por las tiendas de montaña de Benasque.

Pasadas las doce de la mañana se despiden de Nuria antes de partir a Madrid, por el camino dejan en Barbastro a Albertopulos para descansar unos días con su familia antes de partir en el Orient Express a Granada donde les espera el Veleta.


I Trail del Tajuña





El tío del megáfono Albertito de los DrinkingRunners en plena campaña electoral, organiza el I Trail del Tajuña con una distancia de 50 kilómetros por la vía verde desde Arganda a Brea del Tajo.
Como amigo del alcalde en las próximas elecciones se presenta a concejal de deportes con la idea de organizar todos los años la Trail y pillar algún sobre, tan de moda entre los políticos.

En esta primera edición un número reducido de amigos algunos zumbaos participan a pie o en bicicleta.
Entre los elegidos Charly el bravo, Carlos del Caprus, el manito del DrinkingRunners y los zumbaos Franciscopulos y Albertopulos Gacela de Batán. En el grupo solo hay una chica Isa conocida como Caperucita, aunque nadie sabe porque ni conocen la historia.


La prueba no competitiva la idea es llegar juntos a Brea del Tajo donde esperan ser recibidos por el alcalde.
La tarde del 20 de julio a las 19:30 desde la rotonda de Arganda los elegidos parten con ilusión por la vía verde del Tajuña al pueblo de Brea del Tajo, la hora prevista de llegada las 2:00 de la mañana.

En los primeros kilómetros Charly el bravo y Albertopulos corren en cabeza hasta la primera zona de descanso kilómetro 7, donde esperan al resto del grupo para la foto. Continúan por la vía verde asfaltada hasta Morata de Tajuña (Km, 15) en ligero ascenso hasta la cementera, Franciscopulos toma el relevo de Charly para llegar el primero junto a Albertopulos al primer avituallamiento (fuente), donde esperan al resto del grupo.

Atraviesan Morata para continuar 7 kilómetros hasta el siguiente avituallamiento (fuente) en Perales de Tajuña.
Por delante el grupo de las bicis que esperan en el parque de la fuente, Albertopulos llega el primero de los corredores casi de noche, al rato aparecen Charly, el Manito, Franciscopulos con el frontal, Carlos el Caprus y el resto del grupo.

Lo mejor del avituallamiento los dátiles de Carlos y el agua de la fuente, están en el kilómetro 22 ya de noche el grupo al completo encienden sus frontales para continuar hasta el próximo avituallamiento kilómetro 29 en Carabaña donde tres mozas guapas esperan con la nevera con agua y aquarius frio, frutos secos y chocolate.

Solo queda una media maratón hasta Brea o eso creían, continúan todos juntos a pie y en bici, la imagen de verano azul pasa por sus cabezas.
Pasados unos kilómetros se vuelven a juntar para cruzar la carretera y no ser atropellados por algún conductor contentillo.

Albertopulos continua en el grupo de cabeza con el Manito y Franciscopulos, unos kilómetros antes del avituallamiento se marcha en solitario para hidratarse mientras espera con las voluntarias al resto del grupo, están en Ambite kilómetro 49.
Con tanto parón las piernas pesan a falta de algo más de 10 kilómetros para el final y completar los 50 kilómetros del I Trail del Tajuña.

Sin duda este último tramo de la vía verde resulta el más duro por las continúas subidas y el viento en contra que no cesa, algunos ciclistas echan pie a tierra para subir, El grupo de cabeza de los corredores lo forman Albertopulos, el Manito y Charly que siguen a una bici, el siguiente punto de agrupamiento a 2 kilómetros del pueblo en un campo de futbol abandonado, en el cruce espera un coche de protección civil.

Pero al llegar al cruce no ven ningún coche y continúan detrás de la bici por la vía pecuaria con continúas subidas y bajadas, según el gps de Albertopulos están en el kilómetro 48 y no ven luces de ningún pueblo, continúan un par de kilómetros hasta encontrar un cartel que indica la distancia de 14 kilómetros a Brea del Tajo.

Están un poco perdidos y deciden retroceder al cruce encontrando por el camino a más bicis y corredores perdidos.
De vuelta a la carretera encuentran al resto del grupo y el coche de protección civil que les escolta por carretera hasta la entrada del pueblo, los últimos kilómetros corren todos juntos son más de las 2:30 y no esperan un gran recibimiento por los vecinos del pueblo, pero al llegar a la plaza se quedan impresionados por el recibimiento de la gente de Brea incluido el alcalde, tratados como heroes. Desde ahora los vecinos de Brea recordaran la entrada de los nacionales y los fondistas del ultra.

Después de los aplausos y las fotos el alcalde entrega los diplomas de Finisher a los héroes del Tajuña que se avituallan con liquido y sólido, según el gps de Albertopulos la distancia 54 kilómetros en un tiempo de 5 horas y 41 minutos sin contar las paradas en los avituallamientos.


Parte del grupo vuelve a Madrid pero esta vez en coche sus piernas no dan para más.
En cambio Albertopulos y Franciscopulos se quedan a dormir en Brea en casa de la abuela de Albertito, su cuñado el Manito y Bon también se quedan.

Después de una ducha comparten unas cervezas y los sándwich que quedan de la meta, mientras charlan hasta las 5:30 de la mañana.

Albertopulos y Franciscopulos comparten la habitación de Vicky el Vikingo, al día siguiente se levantan poco antes de las 11:00 para desayunar bollería, café y zumo, mientras esperan a las mujeres que traen el postre.

Un bañito en la piscina con parte de los héroes de Brea, hasta la televisión local cubrió el evento del I Trail del Tajuña, que espero que no sea el último.

A las tres a preparar la barbacoa con pollo, panceta, chorizos, pinchos morunos, chuletas de cerdo, una dieta muy saludable y deportiva, acompañada de cerveza y tinto de verano.
Menos mal que el tiempo les respeta y comienza a llover en los postres.
Antes de volver a Madrid comparten unas copas para despedirse de Brea hasta el próximo año.